Introducción

Blog nada literario, ni matemático, dedicado a expresar las ideas que vuelan por mi cabeza cada día.

sábado, 10 de septiembre de 2011

RUTINA

Una palabra que puede causar más de un desequilibrio mental debe ser tomada cuanto menos un poco en serio. El caso es que después de mucho hablar con mis seres más cercanos, la palabra rutina es mayoritariamente tomada con un sentido despectivo y bastante negativo. Todo lo que huele a rutina, comportamiento rutinario,…es nocivo para nuestra salud porque nos encasilla, nos vuelve comunes y llanos, nos convierte en máquinas no personas,…

Son multitud los sinónimos que podía seguir usando, pero no lo voy a hacer, si no todo lo contrario. No es que deba ser un defensor de lo rutinario, pero no es tan malo pienso yo. Después del verano, la vuelta al curro y demás, hace que nazca la rutina de nuevo en nuestras vidas, con sus cosas buenas y malas, como las malas las conocemos, me apetece centrarme en las buenas. El mayor ejemplo lo tiene cualquier persona con hijos, la rutina para ellos no es buena, es imprescindible, necesitan de algo y alguien que los guíe y esa es su rutina, sus horarios, movimientos, comidas,…todo atado y bien atado. Ello nos lleva a que la rutina de los hijos ata a los padres, que se encuentran con una rutina sin comerlo ni beberlo, de las de te acoplas o te vas, que no hay más opciones.

Me gusta más pensar que la rutina no es que nos convierta en máquinas o seres sin personalidad, sino que nos proporciona una red a la que agarrarnos, una especia de guía de la vida o pequeño motivo para seguir, “he de hacer esto, luego lo otro, lo de más allá,…”; por favor, sin exagerar en situaciones del tipo, debo desayunar todos los días en el mismo sitio, a la misma hora y el mismo café con media tostada, que si no es así, ya llevo el día de culo y me ahorco de la primera cuerda que pille. Sin duda, como ya he comentado en otras situaciones, mi enfoque vital me lleva a convertirme en un persona rutinaria, cuadriculada (soy matemático), recta, seria,…pero hay amigo, quítame los niños y ponme una estrella levante bien fresquica que no veas como cambia la cosa.

P.D.: Bienvenidos al mes de septiembre, el modo rutina ponedlo en “On”.

martes, 6 de septiembre de 2011

Gracias

Por los comentarios recibidos en el blog y por los recibidos de palabra. Ya os he dicho lo que agradezco vuestra fidelidad y vuestras palabras de ánimo, seguiré escribiendo de vez en cuando y a partir de ahora contestaré cada uno de vuestros comentarios porque ya he habilitado la forma de hacer comentarios usando el anónimo, mucho más fácil, rápido y cómodo.

Un saludo.

viernes, 2 de septiembre de 2011

ABUELITO DIME TU,…

En una época de recortes económicos que podrían afectar a los sociales, con una crisis galopante y un paro abrumador, quiero romper una lanza por aquellas personas que siempre están ahí para echar un cable a la maltrecha familia media española: los abuelos, que grandes sois. Supongo que al ir haciéndome padre, algún día ojalá sea abuelo, me fijo más en ellos y en su estampa. Su labor dentro de la familia es vital, ante todo como apoyo para sus hijos que ya tienen hijos y viven en un ajetreo contínuo. En esta sociedad que circula a 130 km/h sin multas ni nada, ellos tienen una gran cuota de poder y responsabilidad en la felicidad y estabilidad de las familias.

Hace poco me comentaba un compañero que desde que tienen a su hijo no se han tomado ni un café solos el y su pareja, no hay posibilidad. Unos abuelos están lejos y los otros no tienen salud suficiente. Evidentemente me sentía aliviado porque mis hijos tienen 4 abuelos a su disposición, incluso 3 de ellos sin carga laboral, lo cual nos da unas posibilidades infinitas para poder realizar diversas salidas además con toda la tranquilidad del mundo. Algunas veces te agobias de dejarlos porque no te gusta dejar una responsabilidad tuya en manos de los abuelos, que también tienen su vida, pero es que les gusta, no tienen problemas. Un abuelo/a te vale para llevar al nieto al colegio, recogerlo, llevarlo a inglés, karate o baloncesto, quedarse por la noche, por el día o por la tarde, llevarlo a la feria, al parque, a los cacharros,…Yo los observo a todas horas, en cualquier sitio, con un nieto enganchado, realizando cualquier actividad, aunque ellos mismos la odien, pero tragan con tal de sacar una sonrisita del nieto/a.

Es tal que tragan con los pañales, con darles la comida, con acostarlos cuando y como dicen los padres,…ya se dice incluso aquello de que los abuelos malcrían a los nietos, que pueden hacerlo ya que han criado normalmente a sus hijos. Yo estoy de acuerdo, con mi hija dabamos más normas y directrices a los abuelos, pero ya da igual, si al final no lo vas a ver y van a hacer lo que les venga en gana. Luego te lo cuentan y se quedan tan anchos, y tú que te has tomado 7 copas, pues a tragar, así que corazón que no ve corazón que no siente. En fin, un abrazo a todos los abuelos del mundo y firmo poder llegar a ser bisabuelo con conciencia de serlo, a ver quien no querría.