Introducción

Blog nada literario, ni matemático, dedicado a expresar las ideas que vuelan por mi cabeza cada día.

miércoles, 11 de mayo de 2011

FELICIDAD

El otro día, viendo la película “En busca de la felicidad”, no está mal por cierto, el protagonista citó la expresión que uso muy a menudo de “Nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo, será mentira” o algo así. Me gusta pensar que la vida es así, que las personas nos esforzamos en lograr todo aquello que nos proponemos, desde lo más insignificante hasta lo más trascendente en nuestras vidas (objetivos vitales les llamo yo). En ese camino hacia lo que queremos, es donde vamos logrando pedazos de felicidad, pequeños momentos en los que conseguimos una satisfacción plena de nuestra persona al alcanzar lo que nos proponíamos.

Así, cada vez se impone más en nuestra sociedad, el concepto de felicidad en las “pequenas cosas”, no en aspectos tan vitales, sino en lo que la gente llama esos momentos en que estoy con los amigos, o disfrutando una película, saboreando una comida, nacimiento de los hijos, tu boda, una fiesta,…Yo reivindico que esas llamadas “pequeñas cosas”, son partes de nuestros objetivos vitales y son peldaños en el camino de nuestra vida, escalones que vamos subiendo hasta el fin de nuestros días. La idea es, ¿cuántos peldaños seremos capaces de subir?¿la vida nos hará bajar algunos?¿a qué altura pone cada uno su felicidad, es decir, cuánto de larga es la escalera de cada uno?¿es mejor conformarse con pocos peldaños, pero bien elegidos?...Mi felicidad es simplemente que sigo subiendo escalones.

BLACKBULLET

Un gran amigo define al lugar no como un pueblo costero o de playa, no, no,…es algo más, es una forma de vida, un sentimiento,…claro, en parte sólo entendible para los que llevamos yendo 20 años. A simple vista el lugar más que una forma de vida es un desastre, la playa está mayormente sucia, las instalaciones (duchas, basureros,…) son de pena, falta bastante del paseo marítimo, hay caminos de tierra sin asfaltar, el agua también está sucia en verano, casi no hay establecimientos para tomar algo, ni mucho menos pubs,…en fin, un desastre donde no le gustaría aparecer a ningún típico guiri que se prodiga mucho más por lugares tipo Almerimar, Roquetas o Aguadulce.

Yo por mi parte, defino al sitio como una burbuja que a los que ya estamos dentro no nos deja salir y a los que llegan de fuera pues no los deja entrar. Apreciar blackbullet sólo se puede hacer si has pasado mucho tiempo allí, rodeado de muchísimos amigos, allí nos conocemos todos, hemos crecido, nos hemos hecho personas, nos hemos enamorado,…Anécdotas tenemos mil, a menudo nos reímos de las tonterías que hicieron unos o de lo que dijeron otros, en esas risas seguimos manteniendo vivo el espíritu de lugar, disfrutar al máximo con los amigos/as. Cada vez que llego, me asaltan mil recuerdos y me evado de todo, no hay relojes, no hay días de la semana, da igual el martes o el sábado, la tranquilidad invade mi ser, todo se relaja, se ralentiza,…es una máquina del tiempo hacia la paz interior, un paraíso a sólo 45 minutos del stress y lo cotidiano.


Mi ilusión sería que mis hijos/as apreciaran blackbullet como yo lo hago.